Ignacio Martínez Platas
Oaxaca, Oax., octubre 16. La Sección 22 de la CNTE, está obligando a los maestros, pero principalmente a los directores de las escuelas, a exigir a los padres de familia a firmar una responsiva, condicionando así el reinicio inmediato de clases.
Lo anterior, originó que la anunciada reanudación de clases en las 500 escuelas que presentan algún tipo de daño en su estructura física, no reinicien las clases éste lunes, en abierto desacato al anuncio hecho por el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, (IEEPO).
Esta situación, se está viviendo en las escuelas que reportaron tener algún tipo de daño en su estructura física y tenían previsto reanudar las clases éste lunes 16 de octubre.
Entre éstas, la escuela primaria Abraham Castellanos, localizada en la tercera calle de Reforma, en donde la directora del plantel, Leticia Cabrera Moya, en asamblea general de padres de familia los condicionó a reiniciar las clases éste lunes, a cambio de firmar una carta responsiva.
El argumento, es que en caso de una contingencia de carácter natural, (sismo), los maestros no se harían responsables de alguna lesión ó daño a la integridad física de algún alumno durante el horario de clases.
“Mientras exista algún tipo de afectación en las escuelas debido a los sismos del 07 y 19 de septiembre, los maestros no se responsabilizan de algún daño a los alumnos”, advirtió la directora del plantel en la asamblea del pasado sábado.
Por su parte, los padres de familia, rechazaron el condicionamiento de la directora de la escuela, al considerar que en el horario de clases, los responsables de la integridad de los estudiantes, indudablemente de que lo son los maestros.
De esa manera, los mentores buscan evadir toda responsabilidad al agregar que el dictamen de la Coordinación Estatal de Protección Civil, no es una garantía de que una escuela dañada no se colapse parcial ó totalidad durante otro sismo.
Los padres de familia, insisten en que ésta es una argucia más de la dirigencia de la Sección 22 de la CNTE para no reiniciar las clases a la mayor brevedad posible, como lo ha propuesto el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, (IEEPO).
El objetivo, según los padres de familia, es alargar la suspensión de clases hasta el 23 de octubre, para arrastrar al mayor número posible de profesores a las movilizaciones anunciadas por la dirigencia de la Sección 22 de la CNTE.
