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Colegios, sin protocolo para actividades extra

Las autoridades federales no tienen previstos protocolos mínimos de seguridad, regulaciones o normas para las actividades complementarias que se ofrecen en las escuelas particulares de la CDMX, como es el caso de la natación en el Colegio Williams, donde un niño de seis años murió ahogado el pasado lunes.

La Guía Operativa para la organización y funcionamiento de los servicios de educación básica para escuelas particulares de la Ciudad de México incorporadas a la SEP indica detalladamente cómo prevenir, manejar y evitar casos de acoso o abuso sexual dentro de los planteles, así como maltratos, violencias, riñas y brotes de enfermedades. También establece protocolos de organización y de actuación en caso de sismo, incendio, fuga de gas, inundación, portación de armas, ingreso de drogas y amenazas por artefactos explosivos.

Sin embargo, el documento, actualizado en 2021, sólo dedica un apartado general a cómo deben conducirse las autoridades del plantel en caso de que algún alumno o miembro del personal escolar requiera atención médica y nada que especifique o ponga reglas mínimas para actividades adicionales a las académicas que puedan implicar riesgos. En el caso de natación, éstas serían número permitido de niños en la alberca, tamaños y profundidades de las piscinas, despliegue de rescatistas o instructores, si debe contar con una ambulancia, equipo médico disponible, entre otros.

Agrega que el director técnico (representante oficial para todo acto de orden administrativo o académico relacionado con el plantel) notificará la situación a su superior jerárquico en cuanto le sea posible.

Incluso, el apartado 63, relativo a las visitas escolares a museos y otros espacios educativos, establece que estarán prohibidas las salidas a balnearios, parques acuáticos, lagos, presas, lagunas, ríos, mares y playas.

El miércoles, tras la muerte de su hijo, Leonardo Álvarez acusó que el Colegio Williams no contaba con protocolos o personal adecuado para brindar una clase de natación. En entrevista para Imagen Radio, explicó que cada lunes los grupos del primer año del plantel Mixcoac, donde estudiaba Abner, eran trasladados a unas instalaciones en San Jerónimo. Entraban a la alberca en grupos de 20 a 25 alumnos y eran de seis a ocho personas alrededor de la alberca, entre ellas una profesora de salón que acompañaba a cada grupo. “Eran seis o cuatro instructores de natación para cuidar a 50 o 100 niños cada clase; la falta de protocolos y la negligencia en el caso nos afectó de manera irreparable”, lamentó.

La guía operativa es muy detallada en varias cuestiones educativas, normativas y administrativas, estableciendo desde los lineamientos sobre la Nueva Escuela Mexicana, inscripciones, ceremonias cívicas, escolta escolar, inclusión, planes de estudio y evaluaciones, hasta el manejo de cuotas y becas, los protocolos de ingreso y entrega de los estudiantes a la salida o cómo actuar en caso de que un alumno no sea recogido por sus padres o tutores.

Incluso, el apartado 65, referente a ceremonias cívicas, establece que “las escuelas de nueva creación o las escuelas que deseen sustituir su Bandera, debido a deterioro por el paso del tiempo, presentarán solicitud a través de un oficio dirigido a la autoridad educativa correspondiente”,

Se consultó a la Autoridad Educativa Federal de la Ciudad de México sobre los protocolos establecidos para las clases extracurriculares en escuelas privadas de la capital.

En específico se preguntó sobre el esquema aplicado en el Colegio Williams, sin embargo señalaron que  con motivo del proceso judicial que lleva el caso, en este momento no es posible dar declaraciones.

Con Información de Excelsior

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