- Cassandra respondió a la convocatoria en redes sociales que buscaba leche materna para el hijo de Vasthy Amarillas Cruz, quien murió a causa de complicaciones por covid-19
CIUDAD DE MÉXICO.
Cassandra Bermúdez Verdugo fue testigo del milagro de la vida el 18 de octubre de 2020, ese día se convirtió en madre por primera vez, con toda la esperanza de ver a su hijo crecer en el año de la pandemia más mortífera para la humanidad en los últimos 100 años. El coronavirus llevaba entonces 234 días en México y había cobrado hasta ese momento la vida de 86 mil 167 mexicanas y mexicanos, según el conteo oficial de la Secretaría de Salud.
El primero de febrero de 2021, 106 días después, Cassandra se puso una vez más del lado de la vida y la esperanza; no dudo ni un momento en responder a la convocatoria en redes sociales que buscaba leche materna para Fernando, el hijo de Vasthy Amarillas Cruz, química-bióloga que murió a causa de complicaciones de la enfermedad Covid-19. 10 días antes le fue practicada una cesárea para salvar a su bebé con 6 meses de gestación.
Mi bebé tiene hoy cuatro meses de nacido, tenía, y aún tengo mi propio banco de leche aquí en mi casa porque trabajo todos los días, descanso solo dos, mi mamá me lo cuida y así le da de mi propia leche”; por esa razón Cassandra tenía leche lista para compartir el 31 de enero cuando Aníbal Leos, papá de Fernando solicitó de manera pública en Facebook leche materna para su hijo.
Tenía demasiada leche y estaba buscando la forma de donarla, fue cuando me llegó la noticia muy lamentable de la química Vasthy, que había fallecido en Hermosillo y con el bebecito que llevaba en su vientre de seis meses de gestación y que ocupaban leche materna, fue cuando envíe hace como un mes, junto con otra mamá, las dos juntas, leche en una hielera.
Cassandra nunca tuvo contacto con Aníbal, el papá del bebé, ni con la familia de Vasthy, solo hizo llegar la leche al Hospital Infantil del Estado de Sinaloa, pues en el post de Facebook Aníbal remitió ahí a quien quisiera ayudar.
Aún con esa donación Cassandra tenía mucha leche para donar. “Es demasiada la que se me acumula cada semana y no se puede desperdiciar, entonces me contacté con el Banco de Leche de ahí de Hermosillo, Sonora y me dijeron que claro que ocupaban más, porque además de ese bebé la necesitaban como otros 50 niños internados”.
Con mayor razón quise acumular dos hieleras, estuve como dos semanas, tres semanas, más o menos, porque ellos piden leche que sea reciente, no puede ser leche que tenga mucho tiempo congelada, máximo que tenga 15 días, entonces me dediqué a acumularla en esos 15 días para enviarla al banco de leche y pues así es cómo sucedió todo esto”.
VOLUNTARIOS UNIDOS
Cassandra vive en Navojoa, un viaje a tres horas y media de Hermosillo que se ubica a 320 kilómetros de distancia; la primera vez que donó junto con Laura Domínguez, otra mamá de la localidad, fue también a través de una convocatoria por Facebook que consiguieron un voluntario para hacer el viaje llevando las hieleras.
En la segunda ocasión que Cassandra envió leche materna, el pasado 24 de febrero, fue una empresa de carpooling local quien costeó el viaje. Luego de que la empresa compartiera en sus redes la acción, le empezaron a llegar mensajes a su bandeja de facebook.
La verdad me da gusto, es bueno que las noticias bonitas se sepan, para que más mamás se animen a donar, porque si se necesita, son muchos bebés los que necesitan”.
Sobre el resto de los bebés a los que les es distribuida su leche Cassandra no tiene mayor información, no pensó convertirse en nodriza.
Nunca me imaginé poder alimentar a mi bebé tanto tiempo, es lo que siempre he dicho como trabajo diario no me imaginé poder hacerlo, y que todavía me sobre para más bebés, pues si me siento orgullosa de mi misma”.
Tras su embarazo y alumbramiento en octubre de 2020 regresó a su trabajo como asesora de servicio de clientes de una empresa de telefonía el pasado dos de enero, sin embargo, cuenta con el apoyo para extraerse leche una vez al día y mantener su producción, así como la posibilidad de amamantar a su hijo si se lo llevan en el horario de comida. Y es que aún con su reserva no cambia la oportunidad de amamantar a su pequeño.
Es la conexión más bonita que hay, no es lo mismo darle un biberón, saber que tu cuerpo produce alimento, eso se me hace increíble”.
APRENDIENDO DE LACTANCIA
Sobre la lactancia, aprendió por llevar un embarazo conjunto con una de sus mejores amigas, con quien intercambiaba los datos que iban encontrando.
Ella fue la que me invitó a tomar cursos en línea con asesoras de lactancia, por eso yo me informé de la importancia que tiene la leche materna en los bebés y ahí fue cuando decidí: ‘voy a tratar de darle por lo menos un año de leche materna a mi bebé’ y fue también cuando decidí hacer el banco de leche””.
EMBARAZO EL MOMENTO MÁS DIFÍCIL Y EL MÁS FELIZ
El momento más difícil de la pandemia para ella fue tener que vivir su embarazo en confinamiento.
Sí estuve en contacto con mi mamá, pero sí extrañaba a mis amistades, esa cercanía, más estando embarazada que tú quieres salir y tú quieres disfrutar con todos en compañía, en convivios y perderme de todo eso por mi primer embarazo, o sea la primera experiencia sí fue una un poco difícil, pero pues para mí era más importante mi salud y la salud de mi bebé, de mi esposo, de mis padres, entonces yo más que nada que no pensaba en eso”.
Al mismo tiempo su embarazo fue su mayor alegría. “ El nacimiento y ver crecer mi barriga todos los días, eso yo creo que fue lo que me dio fortaleza para poder sobrellevar el encierro, o sea mi bebé, la alegría de ser mamá y en medio de todo este caos, fue mi alegría en pocas palabras”.
Aún no sabe si habrá una tercera donación por las complicaciones que implica el traslado de la leche que debe llegar congelada para su correcto aprovechamiento.
Me siento muy feliz por todo el impacto que causó haber hecho esto y espero que sirva de ejemplo para muchas mamás, que no que desistan sobre amamantar a sus bebés, yo creo que es la de las mejores herencias que les pueden dejar a sus hijos y si tienen la oportunidad de aparte de eso donar un poquito, aunque sea un poquitito a otro bebé que lo necesite pues qué mejor”.
Información: Excélsior