Ignacio Martínez Platas
San Vicente Coatlán, Ejutla, Oax., Ante el ancestral abandono en que sobreviven los pobladores de San Vicente Coatlán por un añejo conflicto agrario con sus vecinos de Sola de Vega, que ha cobrado una docena de víctimas, la asamblea comunitaria decidió no permitir la instalación de casillas el próximo primero de julio.
De la misma manera, por la indolencia del gobierno del estado y federal por lograr una solución definitiva a la disputa de 19 mil hectáreas de tierras, la ciudadanía acordó no permitir el ingreso de ninguno de los candidatos locales y federales de todos los partidos políticos para realizar campañas proselitistas.
El presidente de bienes comunales, Luciano Osorio Ruíz y el presidente municipal Hipólito Santiago Jiménez, dieron a conocer que a partir de éste día, la comunidad blindó a éste municipio y a sus tres agencias del distrito de Ejutla de Crespo, de toda actividad electoral dentro del XXI Distrito local y X Distrito Federal Electoral.
En conferencia de prensa, señalaron que la ciudadanía solamente elegirá a sus autoridades municipales en asamblea general que se rige por el Sistema de Usos y Costumbres, pero sin la injerencia de ningún partido político.
Por lo tanto, las autoridades comunales y municipales, informaron que San Vicente Coatlán y sus tres agencias municipales, con más de 6 mil habitantes, no ejercerán éste uno de julio el derecho al voto por la delicada situación que se vive en esa población de la sierra sur de Oaxaca.
En pleno proceso electoral por la disputa de tierras entre campesinos de éstas localidades, campesinos de Sola de Vega protagonizaron una balacera que duró alrededor de media hora, precisamente cuando un grupo de comunicadores y autoridades comunales realizaban un recorrido en la zona en conflicto.
La agresión de los pobladores de las agencias de Paso Ancho y Rancho Viejo del municipio de Sola de Vega, ocurrió cuando reporteros de diversos medios de comunicación, acompañados de las autoridades comunales de San Vicente Coatlán realizaban un recorrido por la zona en disputa.
El ataque armado, en el que se utilizaron fusiles de asalto, por las ráfagas que se escucharon a la altura de lo que sería la presa Paso Ancho, duró alrededor de media hora, a solo unos 500 metros de la base mixta de la Policía Estatal y Militar a cargo de personal de la 44/a. Zona Militar de Miahuatlán de Porfirio Díaz.
El conflicto agrario, que por el momento se encuentra en manos del Tribunal Unitario en un juicio de revisión, data de hace más de 60 años, que ha generado un clima de inestabilidad social e inseguridad en la zona.
A unos metros del lugar, se encuentra como mudo testigo parte de la obra inconclusa y abandonada del proyecto de la presa Paso Ancho que captaría el agua del Rio Atoyac para abastecer del vital líquido a la capital del estado.
Por ésta situación, los campesinos comuneros están impedidos a trabajar sus tierras que se localizan en una zona libre y a pesar de ello son agredidos a balazos