Rosario Ojeda
Arropados por organizaciones sociales y dirigentes de comerciantes en la vía pública, comerciantes informales mantienen invadidas las calles del Centro Histórico de la Capital, así como el zócalo y la Alameda de León.
Tan sólo en el zócalo de la capital, el corredor del Palacio de Gobierno del Estado, se encuentra ocupado por al menos cuatro organizaciones de triquis de Copala que lideran Juliana Martínez, Braulio Hernández Hernández, y Jesús Martínez Flores mientras del lado de Flores Magón ha invadido la banqueta el grupo de Lorena Merino.
En la Alameda de León se encuentran también comerciantes del MULT a quienes desde hace varios años les fue instalada una especie de corredor de artesanías frente al edificio histórico de Correos de México, pero también se han instalado dulceros, vendedores de raspados, vendedores de nieves, vendedores de supuestas artesanías que no son de Oaxaca.
En el zócalo, también se les ve a organizaciones como de Corriente del Pueblo Sol Rojo, de la Unión de Artesanos y Comerciantes Oaxaqueños en Lucha (UACOL) y otros más instalados frente a restaurantes de los portales, a penas el año pasado, al igual que algunos del Flores Magón, arropados por la Organización Renacimiento A.C que lidera Carmela Luján.
A vendedores de tacos, memelas, tlayudas o empañadas, así como de guisados también se les observa en las calles de Hidalgo, Guerrero, Trunjano, García Vigil y en espacios anexos a templos históricos como el Carmen Alto, la Compañía de Jesús y otros, patrimonio cultural de la humanidad.
Artículos provenientes de China, de Chiapas y del Estado de México, son ofertados como artesanías oaxaqueñas cotidianamente en el centro histórico de la capital, lo cual ha sido una queja constante de verdaderos artesanos oaxaqueños y comerciantes establecidos.
