Simón, un niño de 6 años de la comunidad de Río Negro, Argentina, repartió volantes a las personas de su comunidad para que no detonen pirotecnia, a favor de su amigo con autismo y de las mascotas.
“No a la pirotecnia por mi amigo Vico y las mascotas”, se lee en las 60 fotocopias que compartió con sus vecinos apoyado por su madre.
La acción se viralizó cuando varios recibieron el papel y decidieron subir fotos del niño, a tal grado que los protagonistas fueron entrevistados por medios locales.
Todo comenzó cuando madre e hijo vieron un video en Youtube respecto a un experimento de los ruidos más molestos para las personas y de la sensibilidad del aparato auditivo de los perros; además su amigo Vico tiene autismo y en temporada decembrinas suele sufrir mucho por el ruido de la pirotecnia.
“Los perros tienen el oído tres veces más sensible que el de nosotros los humanos”, dijo el niño y le pidió a su mamá repartir otros mil volantes.
La madre se sintió orgullosa de Simón, quien fue invitado a participar en una campaña sobre concientización de autismo y pirotecnia, por la Asociación Lazos Azules.
