El Patíbulo
Por Alberto Unda
Durante los próximos 90 días, el arroz de todos los moles, serán las campañas políticas, cómo si las cosas estuvieran sino bien, o al menos sin tanta violencia, inseguridad, desempleo, pobreza rayando en la miseria de miles de compatriotas, sin robos, violaciones, desapariciones forzadas, sin aumentos de precios en cascada.
En estos dos meses y fracción, tendremos que soportar 28.2 millones de spots de radio y televisión, donde las y los candidatos, nos refregaran en el cerebro, sus dizque propuestas a aplicar cuando lleguen al poder.
¿Y por qué dizque? Porque, cuando todos se instalen en el cargo por el que ahora pelean con dureza y en algunos grados hasta con fiereza, ese mismo día, se olvidarán de lo ofrecido y la mayoría estará pensando en la próxima elección.
Reformas políticas han ido y venido, y ningún partido político, y sus gerentes que son quienes realmente mandan en el país, se ha preocupado por poner un dique a la interminable e incansable carrera de las y los chapulines, que ni bien terminan el periodo para el que fueron electos, cuando ya están en plena campaña para saltar a otro cargo.
Por eso es por lo que elección tras elección vemos una apabullante realidad: las y los que aspiran a otro periodo legislativo, municipal o ejecutivo, son los mismos, porque no hay un solo artículo en las leyes electorales que impidan o prohíban, el reacomodo de un cargo a otro.
Por eso el sistema político en México está tan corrompido, porque no hay renovación de cuadros dirigentes, o de aquellos que ocupan los cargos de elección popular, las venas legislativas, municipales o en los gobiernos federal y estatal, están enfermas de arterioesclerosis, con un olor pestilente, asqueroso y nauseabundo.
Pese a que cada proceso implica gastos multimillonarios, la amarga y cruel realidad, es que México, no vive en democracia.
Cuanta razón tuvo el presidente Díaz cuando enfáticamente declaro a un periodista extranjero, que “México, no estaba preparado para la democracia”.
Ni entonces, ni ahora, tenemos un sistema democrático, al contrario, como nunca en la historia de México, se vive una farsa, una fiesta antidemocrática, con el agravante que este sainete implica gastar miles de millones de pesos, que bien aplicados serían una salida real y decorosa al sinfín de problemas que agobian a familias enteras de mexicanas y mexicanos.
En medio de tanta simulación, hoy y mañana lunes dos candidatos presidenciales: Meade y López Obrador inician sus campas, Anaya y Zavala, empezaron en los primeros minutos del viernes 30.
En 90 días, todo habrá terminado, en este lapso habrá tres debates entre candidatos a la presidencia de la República, y millones y millones de pesos, habrán sido gastados para acrecentar las fortunas de los empresarios de la radio, la televisión, las empresas encuestadoras y del marketing político, así como de los fabricantes de enseres, utensilios para el hogar, materiales de construcción, ropa, etc., etc., que las y los candidatos irán regalando como limosnas o migajas a una población que utiliza las playeras con el nombre del candidato y el logo del partido que lo postula, como su ropa del diario, porque a veces no tienen con que tapar sus famélicos esqueletos.
Para el Instituto Nacional Electoral, el señor Peña Nieto, los gerentes de los partidos políticos, y para la mayoría de las y los candidatos, las campañas electorales, no son más que un mero trámite, al final ganará quien ellos quieran, el voto cuenta, pero poquito, porque los intereses empresariales, el seguir haciendo negocios con la venta de todo lo que se pueda vender de los recursos naturales, del subsuelo, las playas, terrenos, son los que en realidad mandan en esta devastada nación.
De todas maneras, habrá que tener paciencia y serenidad, para soportar el bombardeo al cual estaremos sujetos durante los próximos 90 días, lapso durante el cual tendremos que escuchar frases y frases, con los mejores propósitos, con ofertas y promesas que, en su mayoría, no se cumplirán.
Todos dirán que son los más honrados de México y países circunvecinos y que transformaran al país, es una nación maravillosa, donde habrá empleo, justicia, seguridad y grandes inversiones.
El lenguaje con visos de actualidad por aquello de las modernas técnicas de comunicación será hasta impactante, sin embargo, al paso de los años, seremos testigos de una situación igual, semejante o peor de la que ahora vivimos.
Arranca pues el hándicap político-electoral de una batalla que será sin duda la más compleja de los últimos lustros, hay frentes, alianzas, coaliciones, verdaderos cocteles, para embriagar hasta el más abstemio, vuela la moneda que estará en el aire, hasta el domingo 1 de julio, donde lo mejor que podremos hacer es salir a votar para hacer nuestra aportación a esta simulada democracia, que nos han impuesto, los varones del dinero y los gerentes y dueños de los partidos políticos.
Casi 90 millones de mexicanas y mexicanos, votarán el primero de julio, no solo por el próximo presidente de la República, también lo harán por 9 gobernadores, 500 diputados, 128 senadores y más de tres mil cargos a diputados locales y presidentes municipales.
En el inicio de campaña en Oaxaca, la más disputada es por el Senado de la República
Hasta ahora que han dado inicio formal las campañas políticas, finalmente los partidos políticos presentaron en Oaxaca a sus candidatas y candidatos a los cargos de senador, diputados federales, 25 diputaciones locales y 153 presidenciales municipales.
De acuerdo con la ley todavía hay algunos días de plazo para hacer sustituciones o registros de última hora, de momento todos quedaron registrados y varios aprovechando el periodo iniciado el pasado viernes, iniciaron sus campañas.
Durante el proceso previo al registro de aspirantes, varios partidos registraron bajas y deslealtades, siendo el PRI, el más afectado, pues tres priistas que se ufanaban como priistas distinguidos, cegados por la ambición y la avaricia, abandonaron el barco, donde tuvieron las mejores oportunidades de poder, dinero y canonjías.
Estos ex priistas ahora son panistas-perredistas, algo que quizás ni ellos mismos en su sano juicio imaginaron que podía ocurrir, pues parte de su forma para hacerse de un cargo y otro, era mostrar su odio acérrimo contra azules, negro-amarillos y por supuesto para con los de Morena.
Todo ese irracional sentimiento quedó atrás, y ahora en la propaganda que desde ya empezaremos a ver, aparecerán los rostros de estos ambiciosos políticos, al lado de las siglas de los partidos que tanto aborrecían.
Esos carteles y propaganda semejaran el anuncio de las más inimaginables películas de ciencia-ficción, donde la dignidad, la vergüenza, el decoro, la honestidad y la lealtad, son meros adjetivos, ante los que no hay que doblegarse, con tal de conseguir un hueso y gozar de fuero, prerrogativas y nuevas oportunidades para seguir haciendo negocios y dinero.
Eso solo se consigue al costo de lo que sea, aunque para el ciudadano común, resulte incomprensible cómo pueden estos individuos cambiar de piel y lo peor ir en contra del partido que por años y años, los cobijó, y engrandeció económicamente.
En medio de esta situación difícil de entender, compiten por un escaño al Senado de la República, dos contendientes que de entrada tienen una afinidad e identidad más clara con los partidos que los postulan: Susana Harp Iturribarria y Raúl Bolaños Cacho Cué, propuestos por los partidos Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y por la alianza Partido Verde Ecologista de México y Revolucionario Institucional.
Como suplente Susana lleva a Rosendo Serrano, un ambicioso y corrupto ex perredista y Raúl tiene de compañero de formula a Javier Villacaña Jiménez, ex diputado, ex presidente municipal y ex secretario de administración, cuyo capital político le será de la mayor utilidad a Bolaños Cacho Cué, quien tiene como mayor activo, juventud y sólida preparación profesional.
El PVEM y el PRI, combinaron con tino el perfil de sus aspirantes, por la primera fórmula al Senado de la República, lo cual no implica que la contienda será sencilla.
Harp Iturribarria, descansa su aspiración en el efecto Peje, en tanto que por la formula PAN-PRD, el candidato Héctor Pablo Ramírez Puga, durante los 5 años que estuvo al frente de Liconsa, todo el tiempo estuvo en abierta precampaña por la senaduría.
Aunque en realidad quería ser candidato del PRI, las cosas no se dieron por la vía del tricolor y tuvo que dar un salto al vacío, para convertirse en abanderado de esa rara mescolanza que representa el PAN y el PRD.
Ese extraño como incomprensible giro y cambio de camiseta pueden operar en su contra, porque por años, las gentes de las comunidades que recorrió como titular de Liconsa, se acostumbraron a verlo como un personaje más del priismo, así lo recibieron en sus pueblos, así lo escucharon alabando y hablando maravillas de su entonces jefe, Enrique Peña Nieto.
Raúl Bolaños Tercero, como a él le gusta que le llamen, tiene el priismo en la sangre, su abuelo, Raúl Bolaños Cacho Guendulain, fue senador de la República, diputado y dirigente del Comité Directivo Estatal del PRI, en tanto su padre, del mismo nombre dos veces diputado federal y una vez diputado local por el PRI, fue secretario general de gobierno, delegado del Infonavit y presidente del Poder Judicial del estado.
Habrá que conocer el sentido y alcance de sus propuestas, sus allegados dicen que su mensaje será para conseguir principalmente el voto de los jóvenes que hoy son prácticamente mayoría en el estado, lo cual no implica dejar de lado el de los adultos y personas de la tercera edad, que conocieron y simpatizaron con su abuelo, popularmente conocido como “Don Raulón”.
Por algo de lo que aquí comentado, la contienda no será para nada fácil, para ninguno de los aspirantes al senado de la República, que tienen el reto de tratar de convencer a un electorado, decepcionado y desencantado de la difícil situación que se vive, la cual cada día se refleja con mayor crudeza en la mermada economía que vivimos, la cual además se torna cada vez más angustiosa y dramática.
Hernández Fraguas se quiere pasar de listo y por las dudas apoya al candidato de Morena a la presidencia municipal
Por tramposo, mentiroso y ambicioso, José Antonio Hernández Fraguas, cuyo trabajo al frente del municipio citadino, ha sido prácticamente inexistente, ha colocado a su partido, el PRI, en el riesgo de sufrir una nueva derrota.
Por si eso fuera poco, el alcalde capitalino, queriendo pasarse de listo, ha ofrecido dinero a los de Morena, como una manera de vacunarse porque eventualmente puede perder la elección del primero de julio, que políticamente se entiende es su responsabilidad: mantener la presidencia municipal para su partido el PRI.
Apoyando financieramente a Oswaldo García Jarquín, abanderado de Morena a la alcaldía, cree Hernández Fraguas, que, si pierde, el PRI, el nuevo alcalde no le exigirá que entregue cuentas claras, lo cual será difícil por el desaseado manejo que se presume ha hecho Pepe Toño, con los recursos de la comuna municipal.
Entrampado hasta el tope, en su propio laberinto, Hernández Fraguas, presume haber convencido al Partido Nueva Alianza, para que postulara a Raúl Gonzalo Castellanos Hernández, personaje de negros antecedentes, y que también ha desfilado por la mayoría de los partidos habidos y por haber -solo le falta Acción Nacional- y fue coordinador de Comunicación Social de Ulises Ruiz Ortiz.
Es decir, José Antonio Hernández Fraguas, le juega las contras a Enrique De Esesarte Pesqueira, candidato del PRI y a su propio partido, el Revolucionario Institucional.
Y es que además de que la nueva autoridad municipal, lo pueda cachar en muchos de sus malos manejos administrativos y financieros, cuentan que Hernández Fraguas anda muy molesto con el tricolor, porque no le cumplieron su capricho de volver a ser diputado federal, lo cual en automático le hubiera asegurado el fuero benefactor que tanto necesita.
Pero su enojo es mayor porque en este proceso electoral, José Antonio ambicionaba ser candidato del PRI al Senado de la República, pregonaba que él y nadie más merecía esa nominación, soslayando que no supo aprovechar el cargo de presidente municipal, para abonar el terreno para quien fuera su sucesor pudiera ganar y que se esperaba por supuesto fuera del PRI.
Cuando vio las puertas cerradas del CEN para que dieran la ansiada candidatura, Hernández Fraguas, afanosamente buscó que de perdida le concedieran una diputación plurinominal, así no tendría siquiera que hacer campaña en busca del voto y obtener un lugar en el Congreso de la Unión.
También pensó el reelegirse como presidente municipal, ahora por un periodo de tres años, con lo cual pensaba ligar por lo menos cinco años, en la alcaldía, pero tampoco esa posibilidad le fue concedida.
De esas cosas que de repente la dirigencia priista hace bien, dicen que, en afán de ser equitativos, ordenaron una encuesta para saber si José Antonio estaba bien posicionado ante los votantes y los resultados no le favorecieron por ningún lado.
Al contrario, la mayoría de los interrogados coincidieron en señalar, que Hernández Fraguas, repitió el mismo esquema de trabajo empleado en 2007 cuando ocupo la presidencia municipal: cargos, privilegios y negocios para la mayoría de sus familiares y amigos, lo cual otra vez no dio resultado para la ciudad de ahí que, en la recta final, sobresalgan sus errores y desatinos, aunque él y sus amanuenses del Portal Oaxaca Político, se empeñen en difundir y hacer creer lo contrario.
En varias etapas pre electorales, cuando Hernández Fraguas, sentía que no podría obtener alguna candidatura, recurrió al chantaje y la amenaza de abandonar al PRI, método que varias veces le funcionó.
En esas etapas José Antonio hablaba pestes de quienes le ganaban la postulación a tal o cual cargo, como ocurrió recientemente con la designación de Alejandro Murat, de quien previo a la designación, Hernández Fraguas, publicó un documento, en el cual según él argumentaba jurídicamente las razones y los porqués, el actual gobernador, no tenía derecho a ser candidato del PRI.
Cuando con anuencia del gobernador Murat, fue postulado como candidato a la presidencia municipal, Hernández Fraguas, apegado a su vieja costumbre, se tragó sus palabras, y cambió los denuestos por halagos y alabanzas en favor de Murat Hinojosa.
Ahora que no pudo convencer con sus habladas y amenazas, soterradamente, José Antonio ha optado por traicionar a su partido, apoyando otras opciones, con tal de hacer que el PRI y su candidato De Esesarte Pesqueira pierda las elecciones del primero de julio.
@albertounda16